Covadonga tiene "una misión religiosa y no turística", dice el abad al tomar posesión.
Artículo de Cristina Corte publicado el 4/8/2017 en el diario La Nueva España.
"El Santuario tiene que estar abierto al resto de la Diócesis y al resto del mundo", pero tiene un trasfondo religioso y no turístico. Así lo señaló ayer el nuevo abad del Santuario de Covadonga, el avilesino Adolfo Mariño Gutiérrez, minutos antes de tomar posesión de su cargo en la basílica del Real Sitio. La ceremonia, oficiada a mediodía por el arzobispo de Oviedo, Jesús Sanz Montes, fue sencilla (duró 17 minutos) por expreso deseo del nuevo abad que, según los que le conocen, huye de toda ostentación y parafernalia.
El acto, en el que participaron 18 sacerdotes, fue seguido de cerca por más de medio millar de fieles y curiosos. "Mira, si es el arzobispo", se sorprendían algunos asistentes antes de tomar asiento para participar en la misa que tuvo lugar tras la toma de posesión de Mariño. En los primeros bancos de la basílica de Covadonga también se pudieron vislumbrar rostros de la política como el del alcalde de Cangas de Onís, José Manuel González Castro y la diputada del PP Marifé Gómez. La congregación de las Hijas de Santa María del Corazón de Jesús, que desde 2014 se ocupan de la Casa de Ejercicios del Santuario, también quiso arropar al nuevo abad, en un evento que sirvió para la toma de posesión como canónigo de Covadonga de Alejandro González Alonso "Jano", que además se ocupará de las parroquias de Amieva y Ponga como lo lleva haciendo desde el verano de 2014. "En estos momentos en que parece que la fe no es tan manifiesta Covadonga ha significado algo incluso para los no creyentes", celebró "Jano".
El nuevo abad de Covadonga, que desde 2003 se ocupaba de la parroquia de San José de Gijón, toma el relevo de Juan José Tuñón Escalada (que ejerció casi una década) en un momento crucial para Covadonga: el del centenario de la coronación canónica de la Santina, que se celebrará entre el 8 de septiembre de 2017 y el 8 de septiembre de 2018. Algunos aspectos de la toma seguirán en manos de Tuñón, especialista en patrimonio e historia de la Iglesia de Asturias que supervisará la reestructuración del Museo de Covadonga y de la exposición temporal que allí tendrá lugar. Tuñón, que no acudió ayer a la ceremonia, ha sido designado como párroco de San Francisco de Asís (Oviedo).
A poco más de un mes para la celebración de la fiesta de la Santina (el 8 de septiembre), Mariño reconoció que tiene por delante "una gran responsabilidad" y prometió trabajar duro. El abad, que nació en Avilés en 1953 y fue ordenado sacerdote en mayo de 1979, aclaró que su misión es "religiosa, no turística".
No obstante desde su nombramiento los visitantes notan cierta relajación en las normas de protocolo en Covadonga. Un ejemplo: hasta ahora sólo algunas personalidades notables o equipos de fútbol como el Sporting o el Oviedo podían posar junto a la Virgen de Covadonga en la Cueva. Un cartel ubicado frente a la imagen de la Santina prohibía expresamente tomar fotografías a la gente de a pie, una medida que el nuevo abad ya manifestó en sus círculos más cercanos la intención de abolir.