El real sitio, sede de la presentación de un CD con piezas grabadas con el órgano mayor, con el que se pretende proyectar la imagen del santuario fuera de Asturias.
No había escenario mejor. El imperial sonido del órgano mayor ubicado en lo alto de la basílica de Covadonga actuó ayer de improvisado expositor para dar a conocer una obra musical que ayer vio la luz por primera vez en forma de CD. El organista Heinrich Walther, protagonista del disco, fue el perfecto maestro de ceremonias. Nada mejor que una demostración de su sapiencia musical para poner los dientes largos a los numerosos amantes de la música de órgano que ayer se dieron cita en el Real Sitio.
El CD presentado ayer en la Casa Capitular de Covadonga muestra una deliciosa combinación de piezas para órgano de Mozart, Brahms, Liszt y Bach, interpretadas por Walther en el órgano mayor de la basílica de Covadonga y en el órgano de la iglesia de Santo Tomás de Cantorbery de Avilés. Ambos instrumentos han sido creados por los talleres del maestro organero Federico Acitores. La edición del CD que se pondrá a la venta para su distribución en España y Europa, ha sido producida por la discográfica alemana «Organum Classics», especializada en la edición y difusión de música de órgano.
El CD presentado ayer en la Casa Capitular de Covadonga muestra una deliciosa combinación de piezas para órgano de Mozart, Brahms, Liszt y Bach, interpretadas por Walther en el órgano mayor de la basílica de Covadonga y en el órgano de la iglesia de Santo Tomás de Cantorbery de Avilés. Ambos instrumentos han sido creados por los talleres del maestro organero Federico Acitores. La edición del CD que se pondrá a la venta para su distribución en España y Europa, ha sido producida por la discográfica alemana «Organum Classics», especializada en la edición y difusión de música de órgano.
El compacto podrá ser adquirido también en las tiendas del Real sitio con el objetivo de poner a disposición de peregrinos y visitantes la calidad musical de un instrumento que a diario acompaña las celebraciones litúrgicas de la basílica de Covadonga. El abad de Covadonga, Juan José Tuñón Escalada, destacó durante la presentación que «con la colaboración de unos pocos pueden salir grandes cosas». Uno de los objetivos de este disco es según el abad proyectar la imagen de Covadonga y de Avilés fuera de Asturias, así como transmitir la espiritualidad que emana del Real Sitio.
Tuñón Escalada destacó la apuesta por la potenciación musical a través de las diferentes actividades llevadas a cabo por la Escolanía o de los cursos de verano organizados para jóvenes músicos, proyectos estos que forman parte del ámbito pastoral del Santuario de Covadonga en su vertiente cultural.
Heinrich Walther profesor en el Conservatorio Superior de Friburgo y los Conservatorios Superiores de Música Sacra de Heidelberg y Rottemburgo del Néckar, además de organista titular de la iglesia de Saint-Matthieu de Colmar (Francia), aseguró poco antes de interpretar algunas de las piezas incluidas en el CD que para él ha sido «un placer grabar este disco con estos instrumentos».
Publicado por Emilio G. Cea
La Nueva España, 6 de abril de 2013